El gran futbolista y tirano doméstico. Hace 10 años falleció el primer africano del Barcelona, Steve Mokone

El 19 de marzo de 2015, en un hospital de Washington, llegó al final de su vida uno de los jugadores icónicos en la historia del fútbol sudafricano: Steve Mokone. El equipo de Dailysports te invita a echar un vistazo a su vida dentro y fuera del fútbol.

Mokone se hizo un nombre en Sudáfrica a los 16 años y pudo haber ido a Newcastle, pero su padre se opuso al traslado en ese momento, ya que quería que Steve obtuviera una educación.

El traslado a Inglaterra ocurrió a los 23 años, cuando el Coventry decidió ficharlo. Aunque Mokone jugó solo cuatro partidos, su transferencia ya fue una revolución, ya que se convirtió en el primer jugador negro del Coventry en la liga de fútbol inglesa.

Se volvió más icónico para el Heracles de los Países Bajos, llevándolo a la victoria en la tercera liga más fuerte de los Países Bajos. Por cierto, se convirtió en el primer extranjero en la historia de ese país. Después de dos años en los Países Bajos, se mudó a Cardiff y, tras jugar tres partidos, se unió al Barcelona catalán.

Para el fútbol africano, esto fue un fenómeno inaudito, ya que se convirtió en el primer representante de ese continente en formar parte de los "blaugrana". En Barcelona tampoco logró consolidarse, y después de etapas en Torino, Valencia, así como clubes en Canadá y Australia, en 1964 terminó su carrera y se estableció en Estados Unidos.

Su etapa de vida en Estados Unidos no fue tan brillante. En 1978 fue declarado culpable de agredir a su esposa y al abogado de ella durante un proceso de divorcio. Como resultado, pasó más de diez años en prisión, saliendo en libertad en agosto de 1990.

El propio Mokone no se consideraba culpable, creyendo que fue elegido como objetivo debido a sus vínculos con el ANC de izquierda, que se oponía al apartheid y era considerado un grupo terrorista por la CIA.

El camino de vida de Mokone terminó el 19 de marzo de 2015 a la edad de 82 años. Nunca supo que su hija Thandi, después de su muerte, confirmó todas las acusaciones de violencia familiar, afirmando que su padre le infligió violencia física y sexualización.